Siempre he querido ir a una de esas fiestas escandinavas donde hay un barreño de cervezas bien frías, con velas colgadas de los árboles y una mesa bonita decorada con aquellas cosas que todos tenemos a mano. Donde hay bombillas de luz y siempre hay alguien con sombrero y una guitarra animando la fiesta. Si … Continúa leyendo