Combinar un vestido lencero…

Esta semana seguimos con el largo midi pero con una propuesta en forma de vestido. Nos encantan las mezclas y esta; vestido lencero más complementos moteros, es todo un acierto. No sé si mas que lencero es un vestido de encaje, en cualquier caso nos encanta.

La cazadora, además de estar muy bien de precio (139€), está hecha con eco-piel, respetando a los animales y al medio ambiente, aspectos que quizás deberíamos empezar a tener en cuenta a la hora de comprar ropa… No es la primera vez que hablamos sobre como los consumidores deberíamos actuar en nuestras compras: pequeño comercio, moda española, procedencia de las prendas etc. Mi opinión es que se es demasiado exigente con el cliente final. Se nos responsabiliza de demasiadas cosas que la cadena de intermediarios no se hacen responsables, máxime teniendo en cuenta la grave crisis a azota nuestro país y que nos ha dejado a los consumidores muy poco margen de maniobra para tantas exigencias éticas, cívicas y sociales.

Lo que me si me parece lógico es que ante un mismo precio nos decidamos por la marca que tiene un mayor respeto por el medio ambiente, animales, derechos de los trabajadores etc. Y eso, que pasa por ajustar los márgenes de las empresas, si nos da a los consumidores aún en estos tiempos, la opción de elegir si queremos premiar con nuestras compras a unas marcas u a otras, al pequeño comercio o a la gran superficie, a quien fabrica en España (de verdad, no que se limita a coser botones) o a quien lo hace fuera en condiciones dignas.

Adolfo Domínguez parece que es una de las marcas españolas que se preocupa por el entorno, en su página web podréis encontrar todas las acciones que llevan a cabo y como ellos dicen: «Ayudan en nuestro proyecto de dejar el mundo un poco mejor de lo que encontramos» Por aquí somos de la máxima: si no lo veo no lo creo, y por eso poner, no ponemos la mano en el fuego por nadie, sin embargo valoramos y alabamos este tipo de iniciativas que no cargan en el precio final el valor de la diferencia, y que tras darnos la informarnos ponen la pelota de la decisión en el tejado del consumidor.